Actualmente pareciera que cada juguete didáctico que le compras a tus bebés o a tus niños se encienden, tocan música, hablan o lo puedes conectar a la computadora. Si bien estos juguetes pueden ser estimulantes y sirven para educar a tu pequeño, puede divertirse de la misma manera con una pelota. Así que tómate una tarde para volver a las raíces con algunos juegos interactivos para jugar con tu hijo.
Pelotas con texturas diferentes
Deja que tu hijo juegue con pelotas de diferentes texturas y tamaños, como lisas, con puntas, blandas, koosh o de espuma para animar el desarrollo sensorial. En parte, tu pequeño explora el ambiente a través del tacto, lo que hace la variedad de texturas interesantes para él. Si estas jugando con un infante puedes comenzar a enseñarle a lanzar la pelota; esta actividad fomenta el equilibrio y la coordinación. Enséñale que la distancia que puede arrojar las pelotas dependen de su peso, tamaño y material, o si se necesitan una o dos manos para lanzarla.
Hacer rodar la pelota
Hacer rodar una pelota de aquí a allá es un juego que incluso un niño muy pequeño puede disfrutar. Si tu hijo se puede sentar sin ayuda, puede aprender a hacer rodar la pelota. Esta actividad pone a prueba su equilibrio, mejora su postura y desarrolla su habilidad motora gruesa si es capaz de sentarse a una temprana edad. Los pequeños ya algo mayores también disfrutaran de este ejercicio; uno mas activo también rodaría la pelota para botar una torre de bloques o botellas de agua vacías (como si estuviera haciendo boliche) y este desafío adicional de tratar de derribar cosas lo hará aún mas divertido.
Patear la pelota
Aprender a patear una pelota puede ser un gran reto para un infante ya que requiere que distribuya su peso entre sus pies y un esfuerzo coordinado para concentrarse en la patada. Tu pequeño disfrutará de esto, en especial una vez que mejore, porque puedes hacer un arco con dos vasos plásticos para que tu niño patee la pelota al arco.
Jugar con la pelota y el alfabeto
Utilizando una pelota suave, lánzala o hazla rodar hacia tu hijo mientras recitas el alfabeto. Esta actividad crece en efectividad junto con tu hijo, ya que puedes comenzar a cantar del alfabeto incluso con un bebe y cambiar el orden de las letras cuando tu hijo esté aprendiendo el alfabeto, hasta que él pueda decirlo por su cuenta. También puedes ayudar a tu hijo a aprender a contar usando esta misma actividad.
Hacer rodar una pelota por una rampa
Coloca una tabla junto a un cojín de un sofá o una pila pequeña de libros con tal de que forme un ángulo y enséñale cómo hacer rodar la pelota por la rampa. Tu hijo disfruta aprender de cómo funcionan las cosas y le gustará repetir esta actividad con pelota de diferentes tamaños. El que te mire hacer la acción y que la repita genera una sensación de confianza y auto eficacia, ya que aprende que puede lograr cosas.
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